Efectivamente! El descubrimiento ocurrió hace 2 dias durante un episodio de "ñoñería" que hice en un carrito de compras de Walmart.
Y ahora como me siento ese objeto extraño adentro de mi boquita, paso haciendo caras y muecas como si hablara (sin emitir sonido) o como si masticara (sin comida en la boca). También muerdo mis deditos y juguetes para aliviar la comezón.
Incidente desafortunado: Me caí de la cama en la madrugada de ayer, en medio de la pesadilla de lo que fue toda esa noche en la que no dormí protestando y quejándome de la molestia y por supuesto, tampoco dejé dormir a nadie.
Mami me había dado medicina para el dolor, pero no sirvió y me pasé quisquilloso rodando de un lado para otro en la cama y sobre ellos y en un momento en que mi mamá cabeceó (fue lo mas que le permití ese dia), me tiré por sobre su brazo y por mas que trató de agarrarme, terminé en el suelo.
Por suerte fue solo un susto, ya que desde que me levantó en sus brazos, me calmé.
Dice ella que ese es el único beneficio que le ve a la alfombra.
Ayer pasé el dia un poquito mas tranquilo... pero que no se acostumbren, que es solo el primero!
Mami ajustó la altura del colchón de la cuna por precausión, ya que me había dado con tratar de levantarme a mordisquear la barra de la barandilla. Lo último que queremos es una caida desde esa altura!
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